—Jo...— La tomé en mis brazos, haciéndola callar mientras lloraba, las lágrimas mojaban mi cuello. —No tenía ni idea. I…—Si vuelves a pedir perdón, te golpearé—. Ella cerró el puño y me golpeó en el pecho, sin poder en él. —Diosa, Ken. No quiero tus disculpas; Quiero que lo hagas mejor. Háblame, só

Apreté los dientes, el rojo inundó mi visión como si un capilar estallara en ambos ojos, y puse todo lo que tenía en gritar algo de sentido común a estos dos cabezas de nudo. —¡MALdita sea, PARA!No esperaba hacerlos moverse, y mucho menos ser lanzados a unos tres metros uno del otro. De mi parte.M

—¿Se refieren a 'En la guarida de Su Majestad', el clásico de Charlene Pendeghast?—¡Eso es!— Toni exclamó emocionado. —¡Gracias, muñeca! Sí, esa guarida de... ¿Dónde diablos estábamos? ¿La guarida del deseo? ¿La guarida de la pasión? ¿La guarida de los amantes? Bueno, decían que Lord Argus estaba m

Kenny miró hacia adelante, más allá de mí y de los lobos, en algún lugar a cierta distancia. El automóvil golpeó un bache que estaba 99% seguro de que era de origen orgánico, y eso pareció ser todo lo que Kenny necesitaba para sentirse enfermo.Kenny se dobló, vomitando sobre el costado del converti

Punto de vista de Ash—¿Y estás seguro de que no hay una salida a esto?— El techo sobre mí era un mosaico que representaba el mito de la creación anterior a la purga. —¿No puedo decirte aquí mismo, en el santuario de la Diosa, y dar por terminado el día?El rostro de Suzy apareció ante mí, su largo