Share

Capítulo966

Miguel se rio entre dientes y lo ignoró.

En ese momento, Simón golpeó suavemente el hombro de Miguel y dijo con una amplia sonrisa: —¡Dios mío, has sido ascendido muy rápido!

—Claro, gracias a ti, jefe. Cada vez que me necesitas, consigo buenos resultados. Sería difícil no ascender, — respondió Miguel con una graciosa sonrisa.

Simón se burló y dijo: —No me adules demasiado. Con la posición de tu padre, incluso si quisieras ascender lentamente, sería imposible.

Miguel se rió nerviosamente dos veces y dejó de hablar.

En ese momento, Abelardo estaba asustado por completo.

La conversación entre los dos apenas era perceptible, parecía claramente confirmar sus sospechas.

Si Miguel era realmente el hijo de ese alto funcionario, podría pasar el resto de su vida en la cárcel.

Justo en ese momento, siete u ocho hombres vestidos con uniformes de la fiscalía anticorrupción entraron apresurados.

El líder de ellos se acercó a Miguel y le dijo sin aliento: —Lo siento, jefe. Hemos obtenido todos
Locked Chapter
Continue to read this book on the APP

Related chapters

Latest chapter

DMCA.com Protection Status